El Gobernador arrasó en las urnas para definir quiénes estarán a cargo de reformar 42 artículos de la Constitución Provincial. Así Unidos tendrá 33 representantes. En una elección de escasa visibilidad en la opinión pública y que se tomó como una ratificación (o no) del mandato ejecutivo del radical, se dio un dato numérico que no puede pasarse por alto: Pullaro alcanzó 400 mil votos, un descenso más que sensible del millón que lo llevaron a la Casa Gris.
Nicolás Mayoraz, diputado y candidato libertario, retuvo el voto de apenas uno de los cuatro santafesinos que tienen buena imagen de Javier Milei. La foto no desentona con la experiencia de 2023, año en que todos los experimentos provinciales ligados al ahora mandatario fueron un fracaso casi absoluto. El primer turno electoral del 2025, la elección de convencionales para reforzar la Constitución de Santa Fe, extremó esa tendencia.
“Un papelón”, se quejaron en la cima del gobierno. La estrategia electoral la define Karina Milei y la ejecuta –¿o es al revés?– “Lule” Menem. Cuando Maximiliano Pullaro puso la fecha para la elección, en Casa Rosada evaluó tres escenarios frente a una votación que, de arranque, asumieron como una derrota: “objetar” la convocatoria y en protesta no presentar lista; armar un frente con el PRO, radicales con peluca y Amalia Granata; o ir solos con la marca LLA.
Guardiana de la pureza, Karina impuso la tercera opción, quizá convencida de que la buena imagen de su hermano –que según Doxa Data, en marzo fue de 53,9%– era un abracadabra electoral. La lista de LLA quedó tercera, con 14,10% de los votos. “Lule prometió 25 puntos”, reprochó un operador que identificó culpables: “Un capricho de los Menem”, amplió el dirigente en un esfuerzo, a simple vista poco eficaz, para no explicitar las tensiones en el Triángulo de Hierro respecto a la estrategia libertaria para la temporada electoral que arrancó en Santa Fe.
Falla de mercado (electoral)
Casi 100 kilómetros al norte, con otro clima y otro contexto, los Karinos podrían encontrar un contraargumento para cuestionar la utilidad de armar frentes opositores: en Clorinda, Formosa, la LLA, la UCR y el PRO se juntaron en un mega bloque, con distintos sublemas, para enfrentar al PJ de Gildo Insfrán. El peronismo ganó con el 83,2% de los votos, y la unidad opositora se quedó con apenas el 16.8%. El sábado, Cristina Kirchner llamó al senador José Mayans, que vive en Clorinda, para consultarlo sobre cómo venía la elección.
-Acá, Cristina, logramos la unidad.
-¿Ah sí?
-Sí, sí… todos se juntaron contra nosotros.
La tesis sobre si los resultados provinciales anticipan algo sobre las elecciones nacionales permite interpretaciones. Es cierto que los papelones de las listas mileístas en las elecciones para gobernador en 2023 no anticiparon la victoria de Milei en las PASO presidenciales de agosto. Sin embargo, las numerosas derrotas del PJ en las provincias –perdió el gobierno en Santa Fe, San Juan, Santa Cruz y, entre otras, Chaco– anticiparon el derrumbe electoral de UxP, que quedó tercero en las primarias.
En LLA invocan el 2023 para desdramatizar el “papelón” de Santa Fe y darle solo el carácter de “error no forzado”, pero hay que considerar que el contexto cambió. Ahora, Milei es presidente de la Nación y este año enfrentará trece elecciones provinciales — dos de ellas para elegir gobernador, con fecha propia — y una nacional, para repartir diputados y senadores, donde su apellido, salvo que Karina se sacrifique en una candidatura ripiosa, no estará en la boleta. El sistema de Boleta Única de Papel (BUP), que magnifica la incidencia del candidato sobre el partido y el aparato, agudiza el riesgo de que a Milei le cueste transferir –como ocurrió con Mayoraz– votos a sus candidatos.
La BUP y las ausencias
En Santa Fe hubo un caso testigo de cómo el candidato pesa más que la marca. Juan Pedro Aleart, periodista que entró al ecosistema de LLA de la mano de Patricia Bullrich, ganó la elección de constituyentes departamentales en Rosario con el doble de votos que Mayoraz, el postulante de LLA para la lista provincial. Rosario es la ciudad donde Milei mide peor y en la que se registró la baja de la violencia narco, elementos que deberían haber convertido en votos tanto Pullaro como Milei. Pareció primar la visibilidad del periodista Aleart, porque el candidato del gobernador salió segundo.
El sistema santafesino de boletas únicas — que, además, está separado por cargo, lo que funciona como una “invitación” al corte — puede servir, no solo para los libertarios sino para todos, como anticipo de cómo podría impactar la BUP en las nacionales del 26 de octubre.
Maximiliano Pullaro, gobernador y primer candidato de Unidos — el frente que reunió a la UCR, al sector del PRO vinculado a Mauricio Macri y al socialismo — participó del festejo, al que Macri se sumó por videollamada tras un contacto que coordinó la vicegobernadora, Gisela Scaglia. El mandatario provincial le sacó más de 20 puntos al segundo, pero perdió casi 20 puntos en relación a la elección del 2023 en la que fue electo gobernador, cuando logró el 55,7% de los apoyos, y algo más de un millón de votos. Este domingo, Pullaro consiguió 485 mil votos. Es decir, medio millón menos. Sin embargo, en lo que más le importa, el radical logró 33 constituyentes sobre un total de 69, por lo que queda muy cerca –mediante acuerdos con sectores predispuestos– de obtener la mayoría.
El volumen de votos se explica a partir de otro dato concreto de la votación santafesina: la asistencia apenas superó el 55%. Sobre 2,8 millones de electores, fueron a votar algo más de 1,5. Es el índice de concurrencia más bajo en una elección en Santa Fe desde el retorno de la democracia, según un detalle que publicó Facundo Cruz, a partir de un registro del Centro de Investigación para la Calidad Democrática (CICaD).
El voto anti todo
Puede ser injusto señalar solo a un actor, pero el sector de Pullaro –por la responsabilidad institucional del gobierno– pareció apostar tácticamente a una elección con escasa visibilidad. Al margen — sobre todo si se asume que Milei es producto de la “antipolítica” — , en las elecciones de 2025, además de ganadores y perdedores, habrá otros datos estructurales para mirar: la concurrencia y el voto “anti todo”, que expresan el blanco y los anulados. En Santa Fe, este domingo, el voto en blanco rozó los 5 puntos y los anulados llegaron al 4,5%.
La elección de Granata, que quedó cuarta, muy cerca de Mayoraz, valida el planteo retroactivo del sector referido a Santiago Caputo, que sostiene que un frente de LLA con aliados podría haber sido un negocio mucho más rentable. Con una matemática lineal, una alianza libertaria con la líder de Somos Vida le habría garantizado a la Casa Rosada el segundo lugar y cerca del 30% de los votos. Si bien se sabe que la suma de votos no es aritmética, este análisis sirve para evaluar la estrategia: es obvio que hubo votos mileístas que fueron a Granata, como podría ocurrir con votos mileístas que en CABA vayan a Ramiro Marra.
El caso de Santa Fe podría ser un factor que obligue al gobierno a revisar su Biblia de acuerdos electorales. En CABA, LLA no pactó con el PRO y expulsó a Marra, mientras que en otras provincias que votan en mayo, salvo Chaco, aplicó la regla karinista de ir solos, con la marca LLA. Pueden venir una seguidilla de derrotas, como en Santa Fe, que, por acumulación, terminen forzando a Karina a revisar su hoja de ruta.
Peronismos y outsiders
La constituyente de Santa Fe operó, en otros frentes, como una PASO, porque midió el músculo de candidatos de un mismo ecosistema. Ocurrió con el peronismo, que fue con tres ofertas distintas. Juan Monteverde salió claramente fortalecido de la disputa: quedó segundo, relegó a LLA y superó por mucho a Marcelo Lewandowski y Roberto Sukerman, las otras ofertas peronistas. La sumatoria de los peronismos llegó al 26% de los votos, un valor lejano de un caudal que lo haga competitivo para una elección provincial.
Prolífico en la presencia de figuras ajenas a la política, como “Lole” Reutemann y Miguel Del Sel, en la constituyente debutó como candidata Alejandra “Locomotora” Oliveras, excampeona mundial de boxeo, y sacó casi 6% de los votos, superando por caso al FIT. Con las elecciones nacionales a la vuelta de la esquina, lo ocurrido este domingo podría ser solo un adelanto de lo que se vivirá en octubre.
Fuente: Cenital
La entrada Pullaro se alzó vencedor de las constitucionales pero perdió 600 mil votos respecto de 2023 se publicó primero en Rueda de Prensa.